El Día Internacional de las Personas
con Discapacidad no debería ser un DÍA del año para recordar a los ciudadanos
los derechos y participación en la sociedad de las personas con discapacidad,
porque estos derechos deberían existir el resto de los días del año.
No tendríamos que estar hablando de
Integración si la población hubiese evolucionado lo suficiente para saber que
la integración sólo aparece cuando no hay diferencias en nuestras mentes.
Cambiemos pues las mentes para lograr
una sociedad que hereden nuestro hijos, libre de “barreras mentales”, más
incluso de “barreras arquitectónicas”. Porque si cambian las primeras, habremos conseguido superar las segundas.
Cambiemos también términos;
Discapacidad por CAPACIDAD: Capacidad para acceder al empleo, Capacidad para
formar sociedades sólidas, Capacidad para participar en la construcción de una
sociedad sin prejuicios…
Ayuda por AUTONOMÍA: Autonomía para
desarrollar una vida plena, Autonomía para poder escoger una formación
académica y laboral, Autonomía para acceder al rincón de la ciudad que elijas.
Exclusión por INCLUSIÓN social;
Inclusión en los programas de desarrollo de nuestra comunidad, Inclusión en
decisiones en el ámbito político, educativo, laboral, económico y cultural de
Nuestra Ciudad.
No podemos hacer que las personas con
discapacidad auditiva, visual, física o discapacidad intelectual puedan ver,
oír, o caminar sin dificultad, pero sí podemos conseguir una Ciudad Accesible
donde se garantice movilidad a toda la población sin obstáculos ni físicos, ni
morales, ni mentales.
No podemos finalizar este manifiesto
sin hablar de inversión económica. La crisis económica tiene un impacto mucho
mayor en las personas con discapacidad y sus familias, que ven peligrar las aún
precarias conquistas sociales y de derechos obtenidos a lo largo de los últimos
años gracias a la lucha sostenida del movimiento social de la discapacidad.
Estos avances han de ser mantenidos a toda costa como logros irrenunciables y
no son susceptibles de reducción o recorte; los poderes públicos han de
preservar ese nivel de derechos y apoyos e incrementarlos con políticas de
inclusión.
Terminamos con una mención especial a
las Mujeres con Discapacidad: La Exclusión dentro de la Exclusión. Las mujeres
y las niñas con discapacidad están sufriendo con mayor intensidad el impacto de
las consecuencias de la crisis, y el recorte de derechos sociales. Se debe
tener presente la situación de mayor vulnerabilidad en que se encuentran las
personas expuestas a múltiple discriminación, que precisan por esta causa una
acción positiva más intensa y un enfoque diferenciado. La transversalidad del
género debe estar presente en cualquier medida incluida en este programa de
movilización activa.
“SOMOS 1 DE CADA 10 PERSONAS QUE
CONOCES”
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| La Consejera de AASS del Cabildo de La Palma, Jovita Monterrey, acompañada por representantes de entidades que forman parte de Indispal. Lectura del Manifiesto: 03 diciembre 2013 |
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